
A cinco cuadras de mi casa
Cuando era más chica asigné esta
frase como premisa principal de mi filosofía de vida. Entendía por ella que no
solo debo ser un ejemplo o modelo de persona para mejorar las cosas de mi
entorno y del mundo sino que mis actitudes positivas podrían contagiar a las
demás personas y así lograr que muchas hagan cosas buenas por el bien de la sociedad.
En esa época comencé a asistir una vez por semana a comedores comunitarios y
realizaba actividades recreativas con las niñas y los niños de los barrios más
carenciados...
Leer...